Alcalá de Henares acoge una de las universidades más antiguas del mundo, donde todos los años los Reyes de España entregan el premio Cervantes. Aquí han convivido juntas las tres culturas: árabe, judía y cristiana, dejándonos sus huellas por doquier.
Índice Alcalá de Henares
- Palacio de Laredo y barrio San Isidro
- Calle Libreros y Plaza San Diego
- Plaza de Cervantes
- Calle Mayor
- Plaza de los Santos Niños
- Palacio Arzobispal y aledaños
- Calle Colegios
- Ermita de la Virgen del Val y ribera del río Henares
- Complutum, la huella romana de Alcalá
- Información complementaria
Palacio de Laredo y barrio San Isidro
Si llegas a Alcalá en tren, lo primero que encontrarás en el Paseo de la estación es el “Palacio de Laredo”. Palacio del siglo XIX de arquitectura neogótico-mudéjar, mandado construir por Manuel José de Laredo y hoy en día es el Museo Cisneriano, cuando era pequeña fuimos a verlo con el colegio, después fue restaurado y hoy es una verdadera maravilla.
Se visitan pocas estancias, pero destaca el Salón de los Reyes, con pinturas al fresco en sus muros, obra del propio Laredo, representado a distintos monarcas de la corona de Castilla, observa el techo y descubrirás un auténtico planetario según las creencias de la Baja Edad Media.
Otra sala interesante es la Sala árabe. Al ser hoy un museo podrás admirar la Biblia Políglota Complutense, la Biblia de Amberes o documentación de la historia de la famosa Universidad de Alcalá. Desde fuera destaca la torre del reloj a modo de minarete.
Seguimos caminando por el Paseo de la Estación y a la izquierda está el barrio San Isidro, mi barrio de la infancia.
Destaca la ermita de San Isidro, fundada en 1650 por don Juan Castillejo en cumplimiento del testamento de don Diego Portilla, fue encomendada a la Hermandad de Labradores.
En 1967 paso a ser la parroquia de la nueva barriada. Se asienta en las eras de San Isidro, ahora está enclavada en un parque, pero de pequeños estas eras eran el recreo de nuestro colegio “El Colegio San Isidro”.
En las antiguas eras de San Isidro, junto a la ermita, se celebraba en el Siglo XIX la feria de ganado y cuyo mercado del ganado equino era conocido como “El Peaje“. En este artículo viene muy bien explicado la historia de las ferias de Alcalá y el origen de nuestras ferias y fiestas de finales de Agosto.
En el interior de la ermita, en la cabecera, hay una pintura mural realizada por Manuel Laredo en 1885 que simula un retablo neoclásico en forma de templete, con representación de la Inmaculada Concepción.
Durante muchos años su párroco fue D. Inocente López Moraleda, al que todo el barrio le teníamos un gran cariño y siempre estaba presto a ayudar a quien lo necesitara.
Desde el 28 de septiembre de 1995 es un “bien de interés cultural” con la categoría de monumento.
Justo antes de llegar a la ermita se erige La Fuente de San Isidro, alegoría alusiva a este santo, concretamente la que refleja el milagro del ángel arando en su lugar, mientras él rezaba.
Seguimos por el Paseo y llegamos a la gasolinera de San Isidro y delante de ella nos encontramos una escultura de Don Quijote de 15 metros y obra del mejicano Sebastián.
Cruzamos la carretera y llegamos a la fuente de los cuatro caños, la cual ha tenido varios emplazamientos y su nombre viene de sus cuatro caños.
Calle Libreros y Plaza San Diego
Seguimos a la derecha por la calle Libreros y nos encontramos la Iglesia de Santa María. Este templo fue en su origen la iglesia del Colegio Máximo de la Compañía de Jesús. Se comenzó a construir en 1.567, se paralizaron las obras y se retomaron en 1.602 gracias a las donaciones de dos mujeres de la familia Mendoza, se concluyó a falta de fachada en 1.620.
Anexo al templo saliendo a la derecha, nos encontramos la Capilla de las Santas Formas construida en 1687, cuya bóveda fue decorada en 1699 por el pintor Juan Vicente Ribera.
Fue construida para la custodia y veneración de las 24 formas consagradas que fueron entregadas al padre Juárez en 1597, y que con el discurrir del tiempo se mostraban incorruptas y en 1619, fue proclamado públicamente el milagroso hecho, convirtiéndose en uno de los símbolos religiosos de la ciudad.
Seguimos por la calle Libreros y torcemos a la izquierda por la calle Beatas llegando a la plaza San Diego, donde encontraremos el convento de clausura de las Clarisas de San Diego, allí podemos comprar las riquísimas almendras garrapiñadas de Alcalá, uno de los dulces más típicos de la ciudad. Las monjas te atenderán a través del torno.
Al salir nos encontramos uno de los lugares más emblemáticos de la ciudad de Alcalá, la majestuosa fachada de la Universidad Cisneriana, Colegio Mayor de San Ildefonso. La Universidad fue fundada en 1499 por el Cardenal Cisneros y pronto se convirtió en uno de los principales focos de la cultura renacentista europea.
Su famosa fachada fue construida por Rodrigo Gil de Hontañón entre 1537 y 1553 y es un testimonio del esplendor artístico de la época.
Su impresionante claustro renacentista y su biblioteca son dos de sus grandes atractivos. En este conjunto universitario del Renacimiento estudiaron personajes ilustres como Quevedo, Lope de Vega y San Juan de la Cruz.
Más allá de su fachada plateresca, la Universidad alberga maravillas como la Capilla Universitaria de San Ildefonso, que guarda el sepulcro de mármol de Carrara de Cisneros, y el Paraninfo, con sus detalladas yeserías y artesonado mudéjar, donde se entrega anualmente (23 de abril) el prestigioso Premio Cervantes de Literatura, así como los patios universitarios de Santo Tomás, el de los Continuos, el de los Filósofos y el Trilingüe.
Plaza de Cervantes
De aquí salimos a la Plaza Cervantes, otro lugar emblemático de Alcalá, antiguamente era conocida como la plaza del Mercado, durante mucho tiempo fue lugar de celebraciones de ferias y fiestas y hoy en día lugar de encuentro y de paseo de los alcalaínos.
En el centro de la plaza tenemos la estatua de bronce de uno de nuestros insignes alcalaínos D. Miguel de Cervantes, creada por el escultor italiano Carlo Nicoli Manfredi e inaugurada el 9 de Octubre de 1879.
Detrás de ella el quiosco de la música, construido a finales del siglo XIX, antiguamente escenario de pequeños conciertos y allí tuvimos mítines políticos en los años 80, testigo de importantes momentos sucedidos en Alcalá.
Alrededor de la Plaza Cervantes, tenemos edificios con interesantes historias guardadas en sus piedras.
A la izquierda tenemos, el Círculo de Contribuyentes con su histórico barómetro en el centro de la fachada, edificio de estilo neomudéjar, también es conocido como el Casino de Alcalá de Henares, fue construido a finales del siglo XIX, por el arquitecto Martín Pastells.
Se construyó con el fin de albergar la sede de la Sociedad de Condueños. Debemos destacar que la Sociedad de Condueños de los Edificios que fueron Universidad fue la primera sociedad particular y privada que se creó en España para salvar y conservar un patrimonio artístico.
En la actualidad es la sede oficial de la Sociedad de Condueños y acoge el restaurante El Casino. Sitio muy recomendable para comer en Alcalá.
Al fondo nos encontramos con la Torre de Santa María con 109 escalones y 34 metros de altura convertida en mirador desde donde tenemos una de las mejores vistas de la ciudad.
A su izquierda la Capilla del Oidor que alberga exposiciones permanentes sobre Cervantes y su obra, allí encontrarás la pila bautismal donde bautizaron a Cervantes, el 9 de octubre de 1547, aunque restaurada.
También se conserva una copia de la partida de bautismo de D. Miguel de Cervantes, el original se guarda en el Ayuntamiento de la ciudad.
Esta torre y la capilla es lo único que queda después de la destrucción durante la guerra civil de la antigua parroquia de Santa María la Mayor.
El nombre de Oidor le viene porque el Oidor del Rey Juan II de Castilla, don Pedro Díaz de Toledo, decidió construir una capilla a principios del Siglo XV para que reposaran sus restos y los de su familia.
El Oidor era el juez que oía a las partes en un pleito en nombre del Rey, y con el tiempo se convirtió en un cargo no sólo jurídico, sino político, de gran relevancia. Dando el nombre a la capilla hasta nuestros días.
Actualmente se encuentra también allí la Oficina de Turismo.
A la derecha de la plaza tenemos el Ayuntamiento de Alcalá, antiguo colegio-convento de San Carlos Borromeo del siglo XVII, en el siglo XIX pasó a ser el ayuntamiento.
Un poco más adelante se encuentra el Corral de Comedias, es uno de los corrales de comedias más antiguos que aún se conservan en Europa. Por aquí pasaron las obras más famosas del Siglo de Oro.
Inaugurado en 1.601 como corral de comedias, pasó por su etapa como coliseo en 1769, teatro romántico en el siglo XIX, hasta llegar a ser sala de cine en el siglo XX. En los años 70 íbamos al cine con las fundas de la casera.
Como dato curioso en el número 17 de la Plaza de Cervantes, al lado del Corral de Comedias, donde estuvo anteriormente ubicado el Ayuntamiento de Alcalá de Henares, nos encontramos una columna de piedra que en su capitel presenta el escudo de armas de la ciudad de Alcalá de Henares desde 1609.
Seguimos nuestro camino cargado de historia, impregnada en sus monumentos, calles y plazas, por dónde quiera que pasees encontrarás algo que te emocionará o sorprenderá.
Calle Mayor
Llegamos a la calle Mayor, calle peatonal y lugar típico de encuentro y paseo de los alcalaínos, llena de comercios, bares y restaurantes y en cuanto hace buen tiempo sus terrazas se encuentran abarrotadas y bulliciosas. Buen lugar para degustar las famosas tapas de Alcalá.
Es la calle soportalada, a ambos lados, más larga de España con sus 400 metros. En el siglo XII era el lugar donde vivían y comerciaban los judíos hasta 1492 que fueron expulsados, la construcción de las casas era la típica de aquella época, las tiendas estaban abajo y las casas arriba.
Antes, las arcadas estaban sostenidas por vigas de madera, pero entre los siglos XIV- XVI se cambiaron por columnas de piedra procedentes de la ciudad romana de Complutum.
Si paseas por allí, podrás ver algunas de las columnas antiguas, redondas y con restos de pinturas antiguas. En el siglo XIX fueron sustituidas por pilares cuadrados.
Nada más comenzar la calle, en la acera de la izquierda podrás observar algo muy curioso que son las mirillas. Si miras hacia arriba en los números 13, 17, 32 y 37 verás unos pequeños cuadrados que eran las mirillas para ver quién llamaba a la puerta y por ahí les tiraban las llaves.
Un poco más adelante en la acera de la derecha en el único tramo que carece de soportales, encontrarás la Casa Natal de Cervantes, hoy convertida en Museo.
Se trata de una recreación de residencia castellana del siglo XVI, sobre el solar y los restos de la que fue Casa Natal de Cervantes y que fue reconstruida en 1956 y se le añadió un pequeño jardín en la entrada principal.
Es una casa de dos plantas en torno a un patio de columnas en el que hay un pozo que abastecía de agua a la familia, con cocina, comedor y habitaciones , alberga una valiosa colección de muebles antiguos y ediciones del Quijote de diferentes épocas e idiomas.
Delante de la fachada tenemos las estatuas en bronce de Don Quijote y Sancho Panza sentados en un banco de piedra, lugar imprescindible para hacerse una fotografía, a veces hay filas para ello. Inaugurado el 24 de abril de 2005 y es obra del escultor Pedro Requejo Novoa.
A la derecha de la casa tenemos el Hospital de Nuestra Señora de la Misericordia o de Antezana, ubicado en lo que fue la casa-palacio de don Luis de Antezana y doña Isabel de Guzmán, cedido en testamento para hospital de beneficencia, en Alcalá es conocido como el Hospitalillo.
Ha funcionado desde 1483 hasta nuestros días, ya que hoy sigue en activo como residencia de la Tercera Edad y es el hospital más antiguo de Europa que sigue abierto.
No hay evidencia documental pero se dice que en este antiguo hospital trabajó el padre de Don Miguel de Cervantes, Rodrigo de Cervantes, al coincidir su oficio de cirujano sangrador con la cercanía de la vivienda familiar y el hospital.
San Ignacio de Loyola vivió y trabajó aquí, como enfermero y cocinero para los enfermos, en su época de estudiante en Alcalá entre 1526 y 1527.
La bocacalle de la derecha, es la calle la Imagen, allí en el número 5 se encuentra la casa natal de Manuel Azaña, presidente de la Segunda República Española.
En la misma calle de la Imagen, perpendicular a la calle Mayor, se encuentra la Casa de la Calzonera, propiedad de la familia Cervantes, concretamente de su tío Juan.
También se encuentra el convento que da nombre a la calle, Convento de la Imagen o convento de las Carmelitas Descalzas de la Inmaculada Concepción, fundado por la beata María Jesús Yepes y Santa Teresa de Jesús y en el que fue monja sor Luisa de Cervantes, hermana de D. Miguel de Cervantes. La fachada es atribuida a D. Alonso de Covarrubias.
Plaza de los Santos Niños
Seguimos por la calle Mayor disfrutando de cada rincón y del alegre bullicio de terrazas en la calle y al final llegaremos a la Plaza de los Santos Niños donde se encuentra la Catedral-Magistral de los Santos Niños Justo y Pastor, para los alcalaínos “La Magistral”.
Esta catedral tiene el título de Magistral, sólo hay dos en el mundo que lo poseen la de San Pedro en Lovaina, (Bélgica) y la de Alcalá de Henares, significaba que todos sus canónigos son doctores en teología.
Según la historia los niños Justo y Pastor fueron martirizados y decapitados en el año 305 en la época romana en las afueras de Complutum.
En el año 414 se levanta una pequeña capilla en el lugar que fueron ejecutados y así poder custodiar sus restos. Se sustituye por este bello edificio de estilo gótico isabelino de mediados del Siglo XV con su torre renacentista añadida en 1618.
En su interior en la cripta se encuentra la urna de plata con los restos de los santos Niños y la piedra donde fueron decapitados.
También están en la Catedral los restos del cardenal Cisneros y de San Diego de Alcalá, se le conoce con este nombre por haber pasado sus últimos años y reposar sus restos en Alcalá, además lo popularizó Lope de Vega al utilizarlo como título de una de sus comedias.
Actualmente sus restos se conservan en una urna de plata del siglo XVII, regalo de Felipe II y su cuerpo incorrupto se expone todos los años el 13 de noviembre. Yo fui por primera vez a verlo hace uno pocos años.
Podemos acceder a la Capilla de la Virgen del Val, San Diego, La Virgen de la Cabeza y el Cristo de la Agonía.
En la Plaza de los Santos Niños tenemos este mural del artista argentino Miguel Rep, con motivo del hermanamiento de la ciudad Azul en Argentina y Alcalá de Henares, a mí personalmente me gusta mucho, representa a Don Quijote peleándose con los molinos.
Si seguimos por la calle San Juan a la derecha de la plaza, tenemos la Casa de la Entrevista, fue la iglesia del antiguo monasterio de San Juan de la Penitencia, fundado por el Cardenal Cisneros en 1504.
Su nombre le viene dado en conmemoración de la primera entrevista que mantuvieron Cristóbal Colón e Isabel la Católica en el cercano Palacio Arzobispal. En la actualidad es una sala de exposiciones perteneciente al Ayuntamiento.
Palacio Arzobispal y aledaños
Terminada la calle San Juan llegamos al Palacio Arzobispal, actual sede de la Diócesis de Alcalá de Henares. Aquí se celebró la primera entrevista entre Cristóbal Colón e Isabel la Católica.
Construido a partir del Siglo XIII, se realizaron ampliaciones, mejoras y restauraciones hasta el siglo XIX, siendo especialmente notable la intervención, en el siglo XVI, de Alonso de Covarrubias. Fue residencia de los arzobispos de Toledo.
Su monumental edificio tiene elementos de la arquitectura mudéjar, renacentista y barroca, sin embargo, no todo fue esplendor para este histórico edificio, sufrió un incendio devastador en 1939.
Lugar donde se celebraron concilios y en sus dependencias nacieron la hija menor de los Reyes Católicos y futura reina de Inglaterra, Catalina de Aragón, y el emperador alemán Fernando, hijo de Juana “la Loca”.
En el patio del palacio arzobispal vi la representación de Bodas de Sangre, allá por la década de los 70, con el ballet de Antonio Gades, impresionante, una maravilla.
Anexo al palacio tenemos la plaza de las Bernardas. Dicha plaza está enmarcada por tres grandes edificios: a la izquierda el ala oriental del Palacio Arzobispal, con el destacado Torreón de Tenorio del siglo XIV.
A la derecha el Museo Arqueológico y Paleontológico de la Comunidad de Madrid, antiguo convento de Dominicos de la Madre de Dios del siglo XVI y de frente la fachada barroca de la iglesia del Monasterio de San Bernardo, conocido en Alcalá como “Las Bernardas” del siglo XVII.
A comienzos del siglo XXI las monjas dejaron definitivamente el edificio que se convirtió en museo cisterciense. Los frailes dominicos hubieron de abandonarlo en la primera mitad del siglo XIX, tras ser desamortizado, y más adelante tuvo varios usos, uno de ellos como cárcel. Desde el año 1999 alberga el museo anteriormente mencionado.
En el centro de la plaza se alza un obelisco, mientras que junto al Palacio Arzobispal puede verse una estatua de Catalina de Aragón, nacida en ese lugar a finales del siglo XV.
Siguiendo la calle llegamos al Arco de San Bernardo, que da acceso a la Vía Complutense y si la cruzamos entramos en el parque O´Donnell, inaugurado en 1898.
El arco es de una sencilla arquitectura de ladrillo y arriba se encuentra una hornacina con San Bernardo. Se mandó construir en 1618 por el Cardenal Sandoval para sustituir la Puerta de Burgos, que se había quedado situada dentro del convento de las Bernardas.
El arco de San Bernardo forma parte de la muralla urbana de Alcalá, de la cual se conserva un buen tramo con 16 torres y la Puerta de Madrid.
La Puerta de Madrid se inauguró en 1788, reinando Carlos III, para sustituir la puerta medieval del recinto amurallado, de estilo neoclásico, cuya composición sigue el modelo de los arcos del triunfo entonces tan en boga. Como curiosidad fue escenario de la película Espartaco.
Las murallas que rodeaban Alcalá tenían funciones defensivas, de control para acceder a la ciudad y fiscales. Tuvo siete puertas de acceso a la ciudad.
A lo largo del recinto amurallado tenemos el Museo de Esculturas al Aire Libre. Inaugurado en 1993, por iniciativa del escultor José Noja. Se ubica en dos tramos urbanos de la ciudad: alrededor de las murallas que protegen el palacio arzobispal y a lo largo de la Vía Complutense.
A mi particularmente me encanta, consta de más de 50 esculturas de interesantes artistas de nuestra época, una maravilla y estar al aire libre le da más encanto. Considerado el museo más grande al aire libre de Europa.
Cerca de La Magistral en la calle San Felipe Neri, tenemos el Oratorio de San Felipe Neri fundado en 1694, guarda una interesante colección de pintura barroca y una gran biblioteca, aquí estuvo de retiro espiritual el gran escritor D. Miguel de Unamuno.
Las tropas francesas en la Guerra de la Independencia lo saquearon y expoliaron y luego durante la guerra civil fue un almacén militar.
Otro escenario muy bonito de Alcalá se encuentra en la calle Santiago Nº 29, una casa palaciega de la segunda mitad del siglo XVIII, paso por varios dueños y en 1863 la compró el gran fotógrafo francés Jean Laurent, hoy es un edificio que pertenece a las Madres Escolapias que fue comprado en 1904.
La joya de la casa es su monumental escalera de madera decorada con pinturas del Siglo XIX, rematada con cúpula y linterna. Laurent mandó redecorar y repintar la bóveda en 1863. En la ventana de la escalera hay una vidriera policromada, colocada en la década de 1960.
La escalera ha sido restaurada y la casa se convertirá en un museo dedicado al gran fotógrafo francés Jean Laurent.
Calle Colegios
Alcalá nunca deja de sorprenderte, lo mejor es recorrer su casco viejo e ir descubriendo tantos bellos rincones como tiene.
Una calle que a mí siempre me sorprende es la calle Colegios, parte del final de la Plaza Cervantes, animo a recorrerla y recrearos retrocediendo en el tiempo y sumergiéndote en la época de esos estudiantes que llegaban a Alcalá y se alojaban en algunos de esos colegios.
Ahora algunos convertidos en facultades, sede de los juzgados o del colegio de abogados. Ahí también se encuentra la hostería del estudiante y el Parador de Alcalá.
Detrás de la plaza Cervantes al comienzo de la calle Colegios tenemos el Antiguo Colegio-Convento de Trinitarios Descalzos, como dato curioso está en una situación elevada y se sube por una pequeña escalinata, es de principios del siglo XVII.
La Desamortización del siglo XIX colocó a la iglesia y al colegio en manos del Arma de Caballería. Posteriormente fue ocupado por la Comandancia Militar hasta que, en los años 90, comenzó una restauración que lo ha dispuesto para usos relacionados con la Universidad.
El recinto de la antigua iglesia, de cruz latina y cúpula en el crucero, ha sido habilitado y convertido en biblioteca cervantina y Centro de Estudios norteamericanos. Un lugar para mi muy conocido, ya que mi madre trabajó allí.
Al comienzo de la Calle Colegios tenemos el Colegio Menor de San Ciriaco y Santa Paula, de principios del Siglo XVII, conocido popularmente por Colegio de Málaga, es uno de los centros educativos que integraron la antigua Universidad Cisneriana de Alcalá de Henares, y que en la actualidad acoge la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Alcalá. También fue conocido como “colegio de la Paloma”.
Uno de los sitios que siempre visito cuando voy a Alcalá es La Ermita del Cristo de los Doctrinos, ubicada en la Calle Colegios Nº 9. Del siglo XVI, el Cristo de los Doctrinos es una talla de 1590, labrada en madera de satín.
Al lado de la ermita tenemos el Convento de las carmelitas Descalzas del Corpus Christi de 1599. Se las conocía con el nombre de Carmelitas de Afuera por situarse fuera del recinto amurallado.
La calle Colegios llega hasta la plaza de Aguadores, oficio representado con una bella fuente.
Virgen del Val y ribera del río Henares
Desde la plaza de Aguadores se inicia el paseo para llegar a la Ermita de la Virgen del Val, 23 minutos según mapa de Google.
Al final del paseo se encuentra la Ermita de la Virgen del Val, patrona de Alcalá de Henares.
Hay una leyenda que dice: allá por el año 1184 un labrador estaba arando en la margen derecha del río Henares, cuando algo chocó con su arado, escarbó para ver qué era y descubrió una imagen de alabastro de la Virgen y el niño, el labrador se la llevó a su casa, pero la Virgen volvía a la ribera del río; por lo que se decidió levantar en ese lugar una ermita.
La ermita actual data de 1926, ya que la anterior fue destruida en la Guerra de la Independencia. Es de estilo neogótico-neomudéjar con proyecto de Martín Pastells.
La imagen que se conserva de la Virgen es una réplica, ya que la original desapareció durante la Guerra Civil, y el retablo de la ermita es una recreación de la Cátedra del Paraninfo de la Universidad de Alcalá de Henares.
Cada tercer sábado de septiembre, la Virgen del Val, Patrona de Alcalá de Henares, Alcaldesa Perpetua y Doctora de su Universidad hace el recorrido de ida desde la Santa e Insigne Catedral Magistral hasta la Ermita.
Al lunes siguiente, su imagen volverá a la Catedral de Alcalá de Henares en el cortejo de regreso.
Su guarda es la Ilustre Cofradía Nuestra Señora del Val, una de las hermandades más antiguas de Alcalá de Henares que data del siglo XIV y cuenta con 400 hermanos.
Por último yo aconsejo un paseo por la ribera del Henares, de pequeños era nuestra piscina natural. Han acondicionado las riberas y el paseo es muy agradable.
Complutum, la huella romana de Alcalá
Otro de los lugares imprescindibles que ver en Alcalá de Henares es Complutum. Antigua ciudad romana situada a las afueras de la ciudad, y uno de los yacimientos arqueológicos más importantes de la Comunidad de Madrid.
Se le supone el origen de la actual ciudad de Alcalá. Dentro de Complutum puedes visitar la Casa de los Grifos, el foro, la basílica, las termas, las fuentes y el auguraculum.
En las inmediaciones se ubica la Casa de Hippolytus, era la sede de un colegio de jóvenes de la nobleza urbana. Dentro de él destaca el mosaico de los peces.
Información complementaria
Página oficial de turismo de Alcalá de Henares. Imprescindible acceder a ella para no perder detalle. Planos, guías turísticas, horarios monumentos y museos, visitas guíadas, hoteles, gastronomía.
Las mejores tapas en Alcalá de Henares. Si en un bar pides un refresco, o una cerveza, un vermú o una copa de vino, además te servirán una tapa, una tapa generosa. Hay que degustar sus riquísimas tapas con una bebida sentados en una terracita si el tiempo lo permite. La oferta es bastante grande, podemos destacar el Índalo y las Cuevas de Antolín en la calle Libreros.
Para comer hay un gran surtido de restaurantes, como típico a mí me gusta el Restaurante El Casino, la Cúpula, ya que este establecimiento está instalado en el interior del antiguo Colegio Convento de los Capuchinos y puedes degustar una buena comida en un marco incomparable y por último la Hostería del Estudiante.
No irse sin probar tres dulces riquísimos de Alcalá, la costrada, las rosquillas y las famosas almendras garrapiñadas.
Este artículo está dedicado a mi familia y amigos que viven en Alcalá y nuestro agradecimiento a mi hermano José Esteban, por irme aportando las fotos que me faltaban y José Higes por la fotografía de la Plaza de Cervantes.
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